Monaguillos del álgebra y la geometría.
discípulos del cálculo y la trigonometria,
quién lo diria, que la musa que habita,
sus cerebros no deja de bailar,
y pasada la medía noche los suele despertar,
con la solución a la ecuación que despiertos
no consiguieron encontrar....
Ya que su musa trasnochada suele
ser como esa ada que corre
por las noches decapitada...
Y los despierta en plena madrugada,
escudriñando en medio de sus sueños
en la almohada.
Hermitaños de pizarrón,
que llevan por escapulario una calculadora,
que no les sirve de nada si antes,
no han perdido pelo en la almohada.
Porque Las matemáticas no son más
que ejercitadoras de su cereblo,
las cuales procuran que se desarrolle,
el ingenió y criterio...
Pues no basta con resolver ecuaciones,
hay que tener esa vocación de encontrar,
donde otros no encontraron solución.
Porque un estudiante de ingeniería,
más que un ingeniero en formación,
es en esencia la continuidad de
esa vocación hija del ingenio
y la imaginación.
Oxwell L'Bu copyright 2015
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